La Habana (EFE).- El huracán Ian tocará tierra en el extremo oeste de Cuba al menos con categoría 3 (sobre 5) en la escala Saffir-Simpson en la madrugada del martes, informó en su último pronóstico del Instituto de Meteorología (Insmet).
Este mediodía el centro de Ian -el cuarto huracán de la temporada- se encontraba aún a 175 kilómetros al sur del municipio especial Isla de la Juventud (suroeste) y a unos 295 kilómetros al sureste del cabo de San Antonio, el extremo de la provincia de Pinar del Río, oeste del país.
El Centro de Pronósticos del Insmet detalló que Ian -ahora un huracán categoría 1- sigue fortaleciéndose y se mueve sobre el noroeste del mar Caribe, con vientos máximos de hasta 130 kilómetros por hora y rachas superiores, a 20 kilómetros por hora.
Para la tarde-noche de este lunes se espera un incremento gradual y generalizado de las lluvias, que pueden llegar a ser fuertes en algunas localidades del oeste y el centro del país.
Ya se están produciendo fuertes marejadas al sur de la Isla de la Juventud y en la costa sur de Pinar del Río, con olas de entre 5 y 7 metros.
El Insmet también advirtió que Ian puede provocar lluvias intensas y vientos huracanados capaces de elevar el nivel del mar y provocar inundaciones costeras.
Las autoridades de la Defensa Civil Nacional decretaron este lunes la fase de \"alerta ciclónica\" para seis provincias en el oeste y el municipio especial de Isla de la Juventud. Se trata de la segunda de cuatro etapas que las autoridades cubanas establecen para enfrentar desastres naturales.
Además han orientado medidas par minimizar los efectos del huracán en viviendas, centros laborales e instalaciones estatales, y la agricultura, entre otros.
El transporte terrestre y marítimo fue suspendido en algunas regiones y en muchos centros educativos de la mitad oeste del país se suspendieron las clases.
La actual temporada de ciclones en el Atlántico (del 1 de junio al 30 de noviembre) fue calificada como \"muy activa\" con una previsión de hasta 17 ciclones, nueve ellos con la posibilidad de alcanzar la categoría de huracán.
A principios de junio pasado, un fuerte temporal de lluvias asociado al ciclón Alex, azotó a las regiones central y oeste de la isla con un balance de cuatro muertos, cortes en el suministro eléctrico, daños en 750 viviendas (21 derrumbes totales) y daños a 3.200 hectáreas de cultivo.
La última ocasión en que un huracán de grandes dimensiones afectó a Cuba fue en 2017, cuando Irma recorrió la costa norte de la isla de este a oeste dejando 10 muertos y pérdidas materiales valoradas en 13.185 millones de dólares.